Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer que se celebra el 4 de febrero, tenemos el privilegio de volver a leer a nuestra compañera farmacéutica Aitziber Saiz*, experta en nutrición en pacientes con cáncer y que no hace mucho también nos escribió un par de post sobre la alimentación en tratamientos oncológicos y que puedes volver a leer aquí y aquí.
El cáncer es una enfermedad multifactorial, con tratamientos distintos. Pero un factor que tienen en común muchas de las personas que lo padecen es la desnutrición. El estado nutricional tiene una gran importancia en la enfermedad debido a que influye en la evolución y en la respuesta del tratamiento.
Un método sencillo para la valoración del estado nutricional es, el que aparece en la siguiente tabla elaborada por el Instituto de la Salud de Queensland:
Método de cribado nutricional
Parámetros | |
¿Ha perdido peso recientemente de manera involuntaria? | |
No | 0 |
No estoy seguro | 2 |
Sí, he perdido peso | |
De 1 a5 Kg | 1 |
De 6 a10 Kg | 2 |
De 11 a15 Kg | 3 |
Más de 15 Kg | 4 |
No sé cuanto | 2 |
¿Come mal por disminución de apetito? | |
No | 0 |
Sí | 1 |
Total* |
*Total ≥ 2 paciente en riesgo de desnutrición.
Para cuidarse y evitar una posible desnutrición, os damos una serie de recomendaciones dietéticas:
– Fraccionar la dieta en 5 o 6 tomas. Es preferible hacer tomas de menor aporte para que el cuerpo vaya digiriendo los alimentos. En pequeñas cantidades, le resulta más fácil.
– Se recomienda variar la dieta, huir de la monotonía. Por ejemplo cuando comamos verduras, variar en los distintos tipos de verduras, además de modificar la forma de cocinarlas: cocidas, en ensalada, como guarnición…
– Cambiar la rutina de las comidas, para ello se puede comer en distintos sitios de la casa (en la cocina, en la sala…) y en la medida de lo posible proporcionar compañía (algún familiar, la radio…).
– A la hora de escoger los alimentos dar preferencia a lo que sean de su agrado y comer a las horas de mayor apetito.
– Es recomendable que la ingesta de pescado sea superior a la de la carne, alternando pescados azules (bonito, salmón…) con los blancos (merluza, gallo…).
– Las legumbres son una fuente importante de fibra. Se pueden comer cocidas, en ensaladas combinadas con arroz por ejemplo lentejas con arroz.
– El consumo de frutas y verduras debe de ser de 5 al día, intentando que una de las verduras sea en forma de ensalada (crudas). Se puede aprovechar para consumir alimentos de temporada y de nuestra zona geográfica, aportan más micronutrientes y son más sabrosas.
– Intentar beber agua entre las comidas: dos vasos a lo largo de la mañana, otros dos por la tarde…
– Evitar acudir en ayunas a los tratamientos, excepto en los casos que le indiquen lo contrario.
Es importante hacer una planificación de la dieta además de personalizarla contando con un profesional adecuado.
*Aitziber Saiz Golzarri es farmacéutica y graduada en Nutrición humana y Dietética por la Universidad de Navarra. Adjunta en la Farmacia Golzarri, en Vizcaya, es colaboradora de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC). Miembro del grupo de trabajo de nutrición del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Vizcaya (COFBI), imparte talleres y conferencias de educación nutricional a escolares, enfermos oncológicos, tercera edad…
Puedes seguirle en Twitter en: @farGolzarri