En los últimos años las palomitas de maíz han ido ganándose poco a poco la fama de ser un snack saludable.
Ello se debe, por una lado a que no contienen colesterol y por otro, al descubrimiento de que contienen una serie de polifenoles que les otorgan propiedades antioxidantes y muy beneficiosas para la salud.
Sin embargo, hay que tener en cuenta otra serie de datos antes de lanzarse a consumirlas sin moderación.
Uno de los inconvenientes más importantes es el alto contenido calórico que las convierte en un alimento a moderar en caso de sobrepeso u obesidad.
Además, no todas las formas de consumir este snack son igual de saludables.
Como en otros casos, la mejor forma de consumirlas es preparándolas en casa.
Tanto las palomitas que ya vienen preparadas como las que se venden para hacer en el microondas suelen contener más sal, azúcar y grasas y pueden incluso triplicar su valor energético.
No obstante, preparadas de forma casera (en una sartén con unas gotas de aceite de oliva y poca sal) constituyen un aperitivo sano gracias a su alto contenido en fibra o vitamina E, por ejemplo.
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