La llegada del frío supone algunas veces, un desequilibrio entre las calorías ingeridas y el gasto calórico.
En algunos casos, las bajas temperaturas nos incitan a salir menos de casa, y a permanecer más tiempo sin movernos.
Por otro lado, el frío hace que nos apetezcan más alimentos calientes, que nos aporten energía extra, y que, muchas veces, son más calóricos.
Consumir alimentos calientes y practicar ejercicio, son sin embargo, dos formas excelentes de combatir el frío, y no tienen por qué suponer un aumento de las calorías.
Estos son algunos de los alimentos que pueden ayudarnos:
* El consumo de caldos y cremas, es una excelente forma de entrar en calor mientras suministramos vitaminas y nutrientes que ayudan a nuestra salud.
* Las verduras y hortalizas preparadas en crema o puré, suponen también, un suplemento excelente de vitaminas y minerales, y nos permiten entrar en calor.
* Los pescados azules y otras fuentes de Omega 3, cuidan nuestra salud y mantienen un correcto aporte de grasas saludables.
* Las proteínas que encontramos en carne, pescado, y huevos, favorecen a fortalecer el sistema inmunitario y a evitar que el frío cause algún posible problema a nuestra salud.
* Como siempre decimos, un consumo frecuente de frutas, en especial de cítricos, ayudarán también a prevenir resfriados.
* Las legumbres, consumidas dos veces por semana, y sin añadirles grasas innecesarias, también nos proporcionan energía y nos ayudan a entrar en calor.
* Los hidratos de carbono, son una fuente de energía rápida, pero deberemos consumirlos con moderación para no aumentar la ingesta calórica, más allá de lo recomendable.
Speak Your Mind